1. No digás “no”
La poca tolerancia al “no” como respuesta es algo que tienen en común las personas destacadas en su actividad. A veces el truco está en nadar contra la corriente.
Prueba de ello es la autora J. K. Rowling. La escritora de Harry Potter fue rechazada muchas veces antes de que publicaran sus libros. El “no” debe ser visto como la opinión de alguien, nada más. Rowling entendió que ningún rechazo es para toda la vida.
2. Perdé el miedo a arriesgarte
“Para ganar a lo grande, a veces hay que asumir grandes riesgos”, afirma Bill Gates. No siempre es fácil dar un salto de fe en una nueva inversión o aventura empresarial, pero si se quiere subir la escalera hacia el estatus de millonario o multimillonario, los riesgos son una parte del juego.
Esto no significa que se deban tomar decisiones precipitadas y sin pensar. Hay que calcular siempre las consecuencias de los riesgos que tomamos y respaldarlos con planes de acción.
3. Fijate metas inteligentes
Todos tienen sueños y esperanzas, pero los que verdaderamente alcanzan el éxito hacen esos sueños realidad estableciendo los objetivos adecuados. Tenés que dividir tu deseo o sueño en tareas manejables que sos capaz de realizar.
En decir, hay que buscar lograr lo imposible, pero sin alejarse de la realidad a través de metas exigentes y con tiempos de cumplimiento.
4. Hacé contactos
Nadie puede ser exitoso o millonario sin la ayuda de otros. El éxito y la riqueza no solo es el resultado de trabajar duro; también resulta de conseguir contactos significativos y tratar bien a tus buenos trabajadores.
Thomas Corley, quien estudió a los ricos en el libro Rich Habits: The Daily Success Secrets of Entrepreneurs (Hábitos de ricos: Los secretos de éxito diarios de los empresarios), descubrió que 79% de la gente rica pasa por lo menos cinco horas al mes buscando contactos, tanto si es a través de conferencias, reuniones con clientes, o simplemente tomando un café, asegura el portal Analítica.com http://www.analitica.com/
5. Invertí el tiempo en ti
Una diferencia importante entre las personas exitosas y los ciudadanos de a pie, es lo que hacen en su tiempo libre. Es poco el tiempo que tienen para ellos, sin embargo, los empresarios exitosos no lo pasan viendo programas de televisión.
Por ejemplo, Bill Gates y Warren Buffett leen con avidez libros de no ficción, y por su parte Oprah tiene la costumbre de hacer ejercicio todas las mañanas antes de ir a trabajar. El tiempo de ocio debería ser invertido en ponerse en forma, aprender un idioma, o leer una biografía inspiradora.