En la búsqueda de generar nuevos materiales plásticos que sean amigables con el medio ambiente, alumnos de la escuela Industrial Domingo Faustino Sarmiento de San Juan, Argentina, generaron un nuevo bioplástico a partir de tomates y bentonitas.
Como explica esta nota, el innovador proyecto es fabricado a partir de la piel de tomate, un subproducto muy común en la provincia cuyana. Gracias a la cutina (el poliéster de la piel del vegetal), los productos tienen propiedades de impermeabilidad y protección contra los parásitos, además de diversas aplicaciones.
Este proyecto educativo demuestra el potencial de las propiedades de los nuevos bioplásticos y los nanomateriales, cada vez más presentes en una industria que se renueva todo el tiempo con alternativas ecológicas.