En la búsqueda de nuevos materiales biodegradables, una firma mexicana logró desarrollar un nuevo producto que podría transformar el mercado. Se trata de un nuevo desarrollo de fibras conseguido a partir de la fécula de maíz.
Como detalla esta nota, este material es completamente reciclable, tiene buen aroma y se presenta como una gran opción para cumplir la economía circular, esta nueva (y ecológica) estructura sostenible hacia la que está virando la industria plástica.
Con un grave problema en la implementación de este formato, México podría haber encontrado la necesidad de transformar su ecosistema y convertirse en pionero y referente de un segmento en transformación.