Investigadores británicos de la Universidad de Bath han desarrollado un polímero a partir de las agujas del pino. Técnicamente se sirven de su compuesto químico, el pineno, para crear un plástico renovable, sustentable y que no provoca repercusiones negativas en el ecosistema.

El pineno se encuentra presente en la resina, los tallos y las hojas de algunas coníferas. Se le atribuyen diversas propiedades medicinales, pero ahora los científicos le han encontrado una nueva utilidad beneficiosa para el medioambiente. Un detalle a destacar, es que la fabricación de este polímero no requerirá de la tala de árboles, porque puede obtenerse a partir de los desechos de la industria papelera, la cual genera grandes cantidades de residuos de pino.

Por el momento la investigación se encuentra en sus primeras etapas, pero los científicos se encuentran esperanzados en su desarrollo y futura implementación. Pueden obtener más información sobre este asombroso descubrimiento en la siguiente nota.